Whitney Wright, nacida hace 27 años en Oklahoma asegura haber cursado sus estudios, desde preescolar hasta su último año, en un instituto cristiano. Lo cual es llamativo, ya que es habitual que chicas educadas en escuelas cristianas tomen la decisión de entrar a la industria porno. Probablemente debido a que, en dichas escuelas, les repriman su sexualidad, al terminar sus estudios se vean liberadas de todo aquello que les prohibieron.
Ya entrada en el negocio, Whitney no sólo muestra un gran talento a la hora de tener sexo delante de una cámara, sino también antes y después de la acción sexual. Es decir, es una actriz en toda la extensión de la palabra. Muestra expresión corporal, dramatismo, enojo, felicidad; en pocas palabras, es capaz de transmitir y reflejar sentimientos a través de la cámara, cosa que no muchas son capaces de hacer. Como muestra de ello, ahí va una escena para Pure Taboo, productora que, por cierto, busca explotar los dotes histriónicos de actrices y actores que pasan por sus sets de rodaje y, ¡vaya si Whitney cumple con creces! tanto en plan sexual como actoral.
Bola extra: Whitney en la lavandería
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