Dejadme dar una definición antes de entrar en materia: el fisting o fist-fucking es un término con el que se denomina la introducción de la mano en el ano o el coño de la amante (o el amante masculino si se trata del primer caso) de cama. Una práctica, dicho sea de paso, que incluso en el porno se considera extrema dado el riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas que conlleva. Y una vez introducidos (valga la redundancia) en el tema veamos algunas de las técnicas para llevar a cabo con éxito una profunda masturbación con fisting. Contrariamente a lo que se cree el fisting no implica introducir el puño cerrado en la vagina o el culo; a esa variante en concreto se la conoce como punching. Mucho más habitual es el pato silencioso, o aquella inserción de la mano adquiere la posición parecida al pico de un pato, esto es, los cinco dedos se mantienen rectos y se sostienen lo más juntos posible formando el pico de pato para después insertarlos lentamente en el coño o o el ojete bien lubricado.
Muchos de los vídeos que siguen van sobre está técnica, otros en cambio, son para manos y puños más experimentados como en el caso del doble puño: cuando el placer viene dado por el estiramiento del ano o la vagina más que por el movimiento de dos manos dentro del orificio.