Hace seis meses descubríamos a Steph Kegels, una webcamer norteamericana de origen puertorriqueño dominicano, y no podíamos creernos las medidas absolutamente demenciales que lucía, muy orgullosa, de cintura para abajo. Fue amor a primera vista, pero sabíamos que Steph es de las que cuida mucho su trabajo y los tres vídeos que colgamos fueron eliminados en cuestión de horas (las fotos, benditas sean, siguen en su sitio). Hoy queremos volver a esas nalgas extraordinarias con algo de material nuevo (y parte del que cayó la otra vez) para que quienes no la cazaron a tiempo tengan hoy la oportunidad de disfrutar de una mujer fuera de serie. Mientras duren.
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