A ciertas amigas las carga el diablo, puesto que son capaces de traicionar a su mismísima madre. En este caso, una zorra de tetas hipnotizantes aprovecha que su amiga está en la facultad para llevarse al huerto al novio de esta. Y es que su pobre amiga le había comentado que este calzaba una buena polla, y la mamona traidora no tardó mucho en catar la renombrada entrepierna.