Este chico no es de fiar, porque el cabroncete prepara una cámara oculta para grabar un polvo con su novia. Ella no es consciente en ningún momento de que está siendo grabada, por lo que su comportamiento es completamente natural. No obstante, hay que darles las gracias al golfo que ha grabado este vídeo sin consentimiento, puesto que los melones naturales de su novia son un verdadero espectáculo.