Entre personas muy abiertas de mente y poco prejuiciosas los conflictos se suelen resolver de la manera más provechosa, como es el caso que hoy nos ocupa: una mujer casada se ve con su amante ocasionalmente, y en una de tales ocasiones le llama el marido porque tiene ganas de follar. Así que, sin pensárselo dos veces, le dice a su marido que se una a su amante para que se la follen por partida doble en un trío. Solucionado.