Al ser blanca de piel y al tener pecas en su rostro redondeado, Dixie Lynn nos recuerda a la pelirroja Arieta Adams, pero en versión rubia. Además, ambas tienen el mismo desparpajo a la hora de desenvolverse ante las cámaras, y el morbo de las dos es tan mayúsculo que no sabríamos decir con cuál nos quedamos. Así que si hemos de elegir, nos quedamos con las dos.