El dichoso TikTok está arrasando entre un público muy joven que necesita recurrir al insufrible postureo para intentar ser relevante dentro del gran estercolero de mediocridad en el que estamos inmersos. Pero dejando de lado la morralla, hay vídeos que sí captan nuestra atención, como bellas damiselas enseñando sus partes íntimas sin ánimo de lucro. Bien por ellas, puesto que regalan la vista a mucho varón onanista.