La ventaja de tener un buen miembro que se pone duro a las primeras de cambio es que puedes tener a muchas tías deseosas de que te las folles. Así le ocurre a este superdotado afroamericano, que tiene a dos hembrones rendidos a sus pies para que las empotre con su poderosa entrepierna. Una rubia y otra morena, para que el polvo tenga diferentes matices cromáticos.