Junto al bebé infográfico que bailoteaba, Napster y el Rickrolling hay una gran criatura de los abismos de Internet que quienes la conocieron no olvidarán jamás. Goatse.cx era una web que todos habíamos visitado por culpa de algún amigo cabroncete y donde se mostraba la terrorífica de visión de un señor dilatándose el ano con las manos hasta un diámetro de ciencia ficción. Aquella cuasi literal ventana a los infiernos tenía nombre, y era Kirk Johnson, una auténtica eminencia en la comunidad de la penetración anal extrema (por visto hay comunidad de esto, en efecto) que se pasó desde mediados de los noventa subiendo a la red fotos de sus logros en la materia.
Estamos ante uno de los autores más prolíficos de esta y otra disciplinas, con una cantidad de fotos compartidas que supera las 15.000 y vídeos de dilataciones e introducciones de objetos enormes en su ano con más de 22 millones de reproducciones. Nadie consiguió que contestara las numerosos emails de admiradores y estudiosos de internet interesados por las hazañas de sus esfínteres, pero el propietario de Big Sex Toy, una sexshop online especializada en penetración extrema donde era cliente habitual, tenía una opinión nada desdeñable de Johnson: «Es como un músico yendo a una sinfonía en concierto. Ellos oyen cosas diferentes que la gente normal. Si has visto suficientes vídeos de Goatse le puedes reconocer fácilmente. Es un tipo flaco que puede introducirse objetos enormes hasta profundidades increíbles. Admiro sus capacidades.»
Lamentablemente, Kirk Johnson alias Goatse falleció en 2009 a los 58 tras someterse a una cirugía de urgencia para tratar de detener una hemorragia gastrointestinal con infección masiva. Había intentado introducirse un balón de volleyball.
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