El otro día estuvimos echando un vistazo a la historia reciente del porno italiano y lo cierto es que, dejando de lado viejas glorias de discutible talento que se hicieron famosas no solo por el porno, creo que Valentina Nappi puede haberse situado ya en el trono definitivo: ¿es posible que estemos ya frente a la mejor actriz porno italiana de todos los tiempos? ¿Es Valentina el equivalente femenino a Rocco Siffredi? Lo dejo ahí, que da para discusión.
Y no hay mejor manera de ilustrar una reflexión tan trascendental como esta que echando mano de un trabajo muy reciente y representativo de la diosa napolitana: su polvo con Markus Dupree en Evil Creampies de Evil Angel, donde el ruso le practica un relleno de crema sin que falte la dosis de anal, habla por sí solo.
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