Baby Reed no necesita mucha crema para su rostro porque su piel aún es joven y además no ha recibido todo el maltrato al que ella misma ha sometido el resto de su cuerpo pasando horas debajo de las agujas de las máquinas de tatuajes. Por tanto, si la rubia catalana pide otro facial, uno más, es simplemente porque es una viciosa muy cachonda que se vuelve loca cuando le tatúan su cara con semen.
Este post ha sido publicado por Fogardo. Ahora tú también puedes compartir con la comunidad de Orgasmatrix tus propias noticias, reseñas, o cualquier hallazgo pornográfico que consideres interesante.
Comentarios