A muchos os habrá pasado. Ir a meterla para escuchar un «cuidado, que eso es el culo«. Y es que cuando se está en medio del coito, a veces uno no termina de saber bien donde está enchufando la manguera. En el caso del porno es todo más sangrande, claro, y aquí tenemos varios ejemplos de escenas porno en la que alguien acaba por introducirla en el agujero equivocado, con diversas consecuencias. Porque no todas las chicas del porno gustan del anal, y si bien algunas lo aceptan bien, con curiosidad y morbo, otras se llevan el susto de su vida. Incluso, con el tiempo, alguna se convirtió en una especialista. Disfruten de esto vídeos recopilatorio de enculadas involuntarias y cuidadín con dónde apuntan.
Jenna Jameson no hacía anal ante las cámaras. Al menos… voluntariamente. Aunque por su reacción, bastante ligera, intuimos que no era la primera vez que lo probaba. Quizá se lo guardaba para el marido…
La siempre simpática Katie Tomas tiene predilección por los interraciales… pero no por que se la metan por el culo sin querer. Y aún así, se lo toma con unas risas que hacen pensar que era todo cuestión de insistirle un poco…
Ya sabéis como es Rocco: agujero que ve, agujero por el que la mete. En esta ocasión es Nikki Dark la que se lleva la sorpresa (minuto 38:57), que recibe mal. Pero el italiano está a toda máquina y al final… acaba consintiendo, pese al susto inicial.
Un guiño para los fans de lo vintage: una celebrada escena con Jessica Wylde y Mike Horner donde todo acaba la mar de bien (minuto 6.20). Parece claro que está arreglado, pero la chica hace un buen trabajo para engañarnos.
Espero, queridos niños, que hayáis aprendido una lección. A veces es bueno pedir permiso… y a veces no. ¿Habéis tenido una experiencia similar? Compartidlo con nosotros.
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