Lleva desde 2006 dando caña, pero jamás se ha prodigado en los canales más populares del porno americano o al menos no ha conseguido demasiada visibilidad. No en vano, Samantha Saint juega en una liga complicadas que ahora mismo podría encabezar Nicole Aniston: la de destacar más a través de un físico venerado en otras épocas, el clásico estereotipo americano de rubia con las tetas grandes, que por un talento especial en asuntos del mete-y-saca (como, no sé, Belladonna) o unas medidas geométricamente imposibles (como Jayden Jaymes). No obstante, desde el pasado abril parece que ha entrado en racha y su base de fans se está multiplicando por momentos. Algo estará haciendo bien.

Comentarios