Con la entrada de la estrella de rock para preadolescentes Marilyn Manson en la vida (y en otros lugares, imagino) de Stoya, la pálida actriz de North Carolina se alzó como una de las pornstars más populares dentro y fuera de la industria. Sin embargo, lo que debería haber significado simplemente un sustancial aumento en sus ingresos terminó desembocando en su retiro provisional del porno. Desde marzo del año pasado, Stoya no volvió a participar en ninguna producción para adultos y el contrato que tenía con Digital Playground fue finalmente rebocado por el temible ejército de abogados-robot que Manson puso a disposición de su flamante novia.
Ahora, poco después de haber partido peras con el ídolo de las quinceañeras góticas (quien, por cierto, ha vuelto a los brazos de su antigua novia Evan Rachel Wood, otra más que percutible paliducha), Stoya ha decidido volver al sensacional mundillo de las tetas y los coños que tanto le cambió la vida. De momento está en conversaciones con Digital Playground para dirigir su primera producción, así que no esperemos verla tragar rabos hasta dentro de un tiempo, pero esta semana ya ha sido portada de la revista Bizarre, con una prodigiosa galería de fotos de clara inspiración militar. En ella vemos que Stoya sigue conservando ese magnetismo indiscutible y, aunque haya desmentido en más de una ocasión aquellos rumores sobre Manson rasurándole el pubis con la forma de una esvástica, lo cierto es que el rostro de esta mujer de armas tomar nos sigue poniendo firmes. Y no me refiero a la postura, precisamente.
Fotos de Bizarre Mag
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