Se quejaba en su Twitter hace unas semanas de que se sentía infravalorada, que no se le prestaba toda la atención que merecía. Echando un vistazo a los archivos orgasmátricos, razón no le falta: solamente en dos ocasiones le hemos dado un espacio en portada a sus escenas aunque, eso sí, sus deslumbrantes aptitudes y su físico privilegiado no han dejado nunca a nadie insatisfecho. Hoy desafortunadamente toda despedirse de RayVeness, que tras ser madre y replantearse ciertas cosas sobre el negocio del que vive, ha decidido anunciar su retirada vía Twitter. Lo más curioso del caso, a juzgar por sus declaraciones, es que la decisión al parecer ha sido tomada sobre todo por razones morales:
Hace mucho tiempo, el cine ADULTO era divertido, había pasión y tus compañeros de escena eran como tu familia, pero ahora las películas ADULTAS se están dirigiendo hacia el incesto. Como madres acostándose con sus hijos, o padres con sus hijas adolescentes y eso para mí NO está bien. ¡No puedo seguir diciendo que este trabajo es divertido! ¿Cómo voy a trabajar en esto y promocionarlo como algo bueno? También lanzamos películas con «adolescentes»… ¿pero lo llamamos entretenimiento ADULTO?
Estoy muy enfadada. Al principió odié esa etiqueta de MILF porque ahora SOY madre y no quiero que mi niño o mis niños se vean involucrados en mi carrera de cine ADULTO. Odio tener que leer un nuevo guion y decir: «Tenemos que darnos prisa en follas porque mi hija llegará pronto del colegio». Así que he decidido abandonar le porno por la última película que he hecho. Rodaré una escena más y se acabó.
Siempre he dicho que nunca debe uno rendirse por aquello en lo que cree. Pero cuando dejas de creer… es mejor seguir tu camino.
Queda por saber cuál es esa película que ha colmado el vaso de su paciencia, pero lo que está claro es que la actriz de Carolina del Norte va muy en serio. Sus siguientes pasos, según ha dicho ella misma, serán dedicarse profesionalmente a la composición y la interpretación musical a través del sello que ella misma ha fundado. Desde Orgasmatrix no podemos más que desearle toda la suerte del mundo en todo lo que se proponga y recordarla con tórridas escenas como la que sigue junto a Ariella Ferrera y Georgia Jones, perteneciente precisamente a uno de esos psicodramas porno adolescentes que ella misma condena.
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