Savannah Bond
Originaria de Melbourne, Australia, Savannah Bond hizo buena la popular frase de “nunca es tarde, si la dicha es buena”. Y es que esta explosiva australiana debutó en el porno con 29 años, sorprendiendo a propios y extraños gracias a su actitud descarada y a un físico de infarto cincelado en el quirófano con la idea de provocar arritmias a su paso.
Antes, Savannah había asistido a una escuela secundaria católica y conservadora, donde dejó aflorar su rebeldía y donde tuvo sus primeros encuentros sexuales. Más tarde trabajó como esteticista durante varios años, y posteriormente como estríper. Finalmente, decidió incursionar en la industria pornográfica porque quería llevar las cosas a un siguiente nivel, como expresó en una entrevista concedida en el 2019. Para ello se puso en contacto con Jules Jordan y le comentó que tenía la intención de trasladarse a Estados Unidos para filmar. Dicho y hecho, En febrero de 2019 rodó su primera escena (junto a a Manuel Ferrara) bajo la producción de Jules Jordan Video, convirtiéndose inmediatamente en uno de los debuts más sonados en el circuito estadounidense.
Pronto Savannah comenzó a ampliar su abanico profesional en otras productoras de renombre como Brazzers, Naughty America o Nympho, alimentando su creciente fama de auténtica bombshell (bomba sexual). Y escasos meses después de su debut, la australiana rodó una primera e intensa escena de sexo anal (con Markus Dupree) producida de nuevo por su padrino Jules Jordan. Esta primera sesión sodomita abrió la veda, y la imponente rubia repitió en otras productoras especializadas como True Anal y Hard X, entre otros estudios. Entretanto, ya había dejado caer su primera doble penetración bajo la firma también de Jules Jordan, que participó en un ardiente trió junto a Markus Dupree.