Kayden Kross

Esta preciosa rubita de raíces suecas era toda una empollona en el instituto, pero algo debió de cambiar cuando a los 18 decidió convertirse en stripper con la idea de ahorrar unos dinerillos y, atención, comprarse un pony. De ahí pasó a posar para sesiones de fotografía erótica y el resto os lo podéis imaginar. Kayden es uno de esos casos en los que el porno ha jugado más el papel de piedra angular de su fama —al igual que Jenna Jameson y Sasha Grey—, que se ha prolongado a lo largo y ancho de otros campos.

Pese a que se le considera una grandísima actriz y uno de los rostros más bellos de la industria, sus fans siempre han sospechado de poca implicación por parte de la californiana, que suele trabar poco y solo con grandes productoras. Su popularidad, eso sí, se mantiene afianzada gracias a sus apariciones en Penthouse, sus cameos en la televisión y sus intervenciones por escrito en la revista Complex, la Xbix Magazine y la web de Xcritic.

Está considerada una de las 12 pornstar más conocidas de la década y actualmente es pareja del también actor porno Manuel Ferrara.