Anita Toro
Criada en un entorno francamente disfuncional, la vida de esta calenturienta colombiana parece sacada de una de esas telenovelas que suelen triunfar cerca de su tierra. Su padre era un alcohólico abusador y su madre sufría severos trastornos mentales, así que tan crudo ambiente la arrastró a aguas todavía más oscuras: poco después de su primer período la desvirgaba un policía que la engañó, y posteriormente se iniciaba en la prostitución. A los 16 conocía al que un años después se convertiría en su marido, un cirujano plástico norteamericano de 63 años en plena travesía de turismo sexual que decidió rescatarla y llevársela a su casa de California.
Parecía un final tranquilo, pero Anita crecía fuerte y sana y con un cuerpo mareante, así que decidió sacar provecho a su dilatada experiencia sexual y distribuyó algunos vídeos porno en las redes sociales de Colombia, donde pronto empezó a hacerse famosa bajo el pseudónimo de Juana. Poco después se operaba las tetas y se unía a una web de softcore. Enn 2010 arrancaba su propia web donde vendía material softcore a sus suscriptores y lo dejaba dos años después para dedicarse a sus estudios de Audiovisuales. Es mismo año volvía a la escena con más fuerza que nunca, con el pelo teñido y la decisión de empezar a grabar porno hardcore convencional, un mundo muy competitivo el que actualmente trata de hacerse hueco.