Posesión Infernal es un clásico del terror más de moda que nunca, con un musical que se representa en Madrid, un remake en ciernes y ahora, una parodia porno: Evil Head. Gore, zombies, mamadas y sexo anal se unen en un de las mejores pornoparodias que hemos visto últimamente, con Joanna Angel a la cabeza.
Tengo que reconocer que la propia Joanna, como actriz porno, no es santo de mi devoción. Demasiados tatus para mi gusto. Pero hay que reconocer que, como motor de Burning Angel Entertainment, se ha ganado todo mi respeto, haciendo pornoparodias de películas de género muy selectas, divertidas y con la energía que le faltan al pesado de Axel Braun. La chica es una verdadera fan del terror, y eso se nota en films como Re-Penetrator o esta Evil Head (que podíamos traducir aquí como Mamadón Infernal).
La historia es más que conocida: un grupo de adolescentes se van de excursión a una cabaña y allí descubren un libro maldito. Este despierta a unos antiguos demonios del bosque que poseen a los pobres muchachos. Ash, el superviviente más obstinado, resistirá como puede a los ataques de las criaturas.
Transcurriendo toda la acción en el interior de la cabaña y en el bosque, lo que sorprende es que no se curraran antes una versión xxx del film. Eso sí: la casa de Evil Head no tiene sótano, así que el Necronomicon se lo encuentran en un cajón del despacho. Eso sí: aquí es una especie de kamasutra con esqueletos.
Ash, el héroe del film, es interpretado con Tommy Pistol. La propia Joanna Angel es su atolondrada novia. Está claro que ella no da el papel de jovencita inocente, pero en cuanto se desmelena un poco nos convence un poco más. Cachonda por los dibujos del Necronomicón, se lo monta con su cariñín… y con su amigo Scotty. Los tres montan un trío con doble penetración incluida. La cosa empieza bien.
Shelley (interpretada por una tal Kleiko), la supuesta novia de Scotty, les decubre y se toma fatal una relación tan abierta. Dolida, huye de la cabaña… para acabar siendo víctima de los demonios: los antiguos espíritus han despertado y poseído a los árboles, y la chica es follada por sus ramas.
Igual que en el film de Sam Raimi, sólo que aquí lo vemos con todo detalle y, en este caso, ella parece encantada con ser penetrada por los abetos. ¡Esto sí que es un pornoparodia como Dios manda! Seguro que a los fans de Urotsukidoji y demás les molará bastante esta triple penetración tentáculo-vegetal.
Ella es la primera poseída, y vuelve a la casa para acabar con el resto. Su manera de hacerlo: follarlos a todos. Se ve que la posesión se contagia sexualmente. Así su novio, primero, y Linda, después, caerán, victimas de los demonios kandarianos. Incluso Ash verá poseída su mano, y tendrá que cortárserla. Su error: meter el dedo en el coño de una poseída
Eso no quitará que Ash, ya sin mano y con una motosierra, se folle tanto a su ex-novia como a otras dos diablesas en el apoteósico final. Y digo tres porque Dana Dearmond se une a la fiesta. Un final que incluye una decapitación y, atención, a nuestro protagonista eyaculando sobre la cabeza cortada de su exnovia. Llevo más de 20 años viendo porno y creo que es la primera vez en mi vida que veo algo así.
Además de la propia localización, los diálogos y situaciones han sido recreados con relativa fidelidad, pero buscando siempre añadir chistes y momentos simpáticos, e incluso algo de improvisación. La producción está permeada por un sano tono lúdico en toda la producción. Se lo pasan bien y nos lo hacen pasar bien, y eso siempre puntúa en estos films.
Es también de agradecer el empeño que han puesto en hacer la película. Burning Angel lanza apenas un título al año, así que le pueden dedicar un cierto tiempo. Las endemoniadas actúan y se parecen a las de la película, el guión tiene chistes y referencias a las tres pelis, alguno planos son calcados al original y hasta el actor principal tiene momentos muy «Campbell» (otros no tanto). Tanto Joanna como el director, Doug Sakmann, se declaran fans del film. Y se nota.
Ya sabéis que siempre me suelo quejar de que estas pelis suelen ser flojas y rutinarias en contenido sexual. No es el caso. Las escenas no son las más excitantes jamás rodadas, pero hay tríos, cuartetos, anales y hasta sexo con árboles, donde otros solo ponen uno v uno. Además, lo que sucede en las escenas sexuales tiene efecto en la trama. En todas las parodias de superhéroes los polvos funcionan a modo de paréntesis, no teniendo incidencia alguna en la trama. Eso sí: insisto en que vendría bien que fueran algo más cortas.
El resultado final es bastante satisfactorio: un film imprescindible si sois fans de las películas originales y un soplo de aire fresco en el viciado universo de la pornoparodia. Le daremos un merecido 4 / 5.
Lo mejor: Un homenaje honesto y fiel. Variedad de situaciones sexuales.
Lo peor: Que no te gusten las chicas tan tatuadas.
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