Quizás el nombre de Lanny Barby no resuena tanto como el de otras pornstars más reconocidas por el gran público, pero eso no significa que esta hermosa canadiense no haya alcanzado el estatus de leyenda del porno. Es por ello que hemos decidido incluirla en esta sección, pese a no ser una actriz multipremiada ni demasiado idolatrada por la industria porno en USA.
“Me encantan las mujeres y los hombres por igual a la hora de tener sexo. ¡Lo que realmente me importa es que aguanten mi ritmo!” Empecemos por esta frase de Lanny para ir haciéndonos una idea de su personalidad.
Todo comenzó en Montreal (Canadá) minutos después de cumplir la mayoría de edad, ya que fue la primera vez que posó desnuda para una publicación de Québec. Aún no contaba con sus imponentes atributos mamarios y tenía el cabello teñido de rubio. En cuanto al porno, empezó desde abajo, haciéndose poco a poco con un nombre en su país natal, hasta que en el año 2001 dio el salto a la factoría hardcore estadounidense, debutando con Bobby Vitale y Lexington Steele.
A medida que el tiempo pasaba, la crítica y el público comenzó a ver en la canadiense una gran actriz porno sin remilgos y con mucho arrojo. Trabajos como Gang Bang Auditions 9 y Diabolic 2 on 1 14 dejan claro la predisposición y el atrevimiento de Lanny Barby.
Su belleza y presencia, sus preciosos ojos azules y su gran desempeño en pantalla impulsan su carrera en Estados Unidos, siendo portada de la revista Penthouse en junio del 2003. Comienza a trabajar con directores del momento, como Jules Jordan, con quien filma en 2005 la octava secuela de Ass Working. Fue por esa época cuando firmó un contrato con Vivid Entertainment, un gran paso para cualquier chica de la industria pornográfica. Cuando dicho contrató expiró, Lanny se retiró y volvió a su tierra natal.
Su legado no es tan extenso como el de otras compañeras, pero la calidad de su contenido es indudable, así como su belleza arrebatadora. He aquí nuestro homenaje.
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