Su presencia online, dividida en distintos perfiles del mundillo del porno, brotó más o menos a finales de 2017. Mia Bandini podría haber sido una de tantas actrices porno semiprofesionales con el suficiente interés en exhibirse como para mantener una filmografia autoeditada nutrida y de calidad pero no tanto como para dar el salto a la farándula cerda, codearse con estrellas y negociar contratos, pero da la impresión de que esta estadounidense de 25 años es mucho más. Su talento para el porno parece impropia de alguien de la sociedad civil, y su desparpajo ante la cámara la pone a la altura de profesionales consagradas. No sé si Mia llegará a rodar algún día en un set profesional, pero no cabe duda de que no desentonaría ni un poquito.
Y mucho ojo, por cierto, a la manera en que aborda uno de los grandes tabúes del porno: el sexo durante el período.
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