Seguimos con esta recién inaugurada guía del porno de alto nivel para lectores sin tiempo que perder, un compendio modular en la forma y en el fondo: no solo lo publicamos semanalmente a modo de fascículos, sino que también lo estamos dividiendo en temáticas que, creemos, sirven de eje alrededor del cual giran las fantasías de la mayoría de pornófilos y pornófilas.
Si la semana pasada empezábamos con los mejores culos del porno, hoy nos toca acercarnos a la otra gran obsesión anatómica de toda la humanidad: las tetas. Eso sí, puestos a buscar matices para acotar el terreno, vamos a centrarnos en las tetas sin ningún tipo de mejora o alteración quirúrgica. Las tetas fruto de la genética y la alimentación, esto es, las tetas naturales.
Os recordamos de nuevo la misma consideración previa: nosotros nos limitaremos a una criba de doce elementos, pero vosotros podéis complementar en los comentarios porque, huelga decirlo, son todas las que están pero no están todas las que son. Eso sí, antes de lanzaros a reprocharnos o sugerirnos ausencias e incorporaciones, tened en cuenta una consideración previa: solo incluiremos actrices porno (no modelos eróticas) que estén actualmente en activo.
Keisha Grey
Iniciamos este apasionante periplo mamario, paradójicamente, con una mujer que quizá no destaca tanto por sus tetas como por la combinación armoniosa de sus activos físicos. Seguramente lo de Keisha Grey no es EL MEJOR culo ni LAS MEJORES tetas, pero sin duda mercería un puesto en ambas listas. Hemos optado por su delantera, que a nosotros en particular nos parece ideal.
Lucie Wilde
Esto es un peso pesado, una auténtica anomalía morfológica por que la debemos dar gracias a los caprichos del misterio hormonal y el desarrollo femenino. Lucie Wilde es prácticamente un dibujo animado, en concreto un hentai japonés de esos en los que las chicas son jovencísimas, tienen cara de no haber roto un plato y del pecho les cuelgan unas tetazas con las que podría asfixiar a un hombre adulto.
Viola Oh
Un caso de perfección absoluta. Pueden gustarte más las tetas de otra pornstar activa o retirada, puede soñar con las ubres enloquecedoras de Gianna Michaels o esa vecina amiga de tu madre a la que un día se le escurrió el bikini en la piscina comunitaria, pero no se pueden mejorar las tetas de Viola Oh: caída perfecta, plenitud ideal, coloración adecuada y diámetro aureal proporcionado. Unas mamellas esculpidas por los dioses.
Nekane
Llevamos toda la vida gritando a los cuatro vientos que Nekane tiene uno de los cuerpos naturales más bonitos que haya visto jamás la historia del porno internacional. No nos podíamos creer que la granadina de sonrisa se fuese a quedar en los límites del panorama español, e incluso le preguntamos en una entrevista por qué demonios no se proyectaba en el extranjero. Finalmente alguien nos ha escuchado y Nekane ya está en proceso de conquista a escala mundial, y esas tetas imposibles tienen gran parte de culpa.
August Ames
Hace ya tiempo, quizá desde pocos meses después de su debut, que August Ames ha entrado en un proceso de declive un poco trágico. Por fortuna, esa artificialización solo ha afectado a su rostro y a su actitud delante de la cámara, ahora algo histriónica y poco natural, pero su cuerpo y sobre todo sus espléndidas tetas no han sufrido ni una pizca de downgrade. No son muy grandes ni muy llenas, pero su firmeza y su coloración las hacen un ejemplar bastante único.
Marina Visconti
No hay muchas rusas que logren salir de la jungla superpoblada que es el porno europeo, cruzar los océanos y plantarse en en territorio americano con opciones de ser algo más que una comparsa hecha de carne sin cobrar la menor relevancia. Marina Visconti es cuasi un paradigma en este sentido: esas considerables tetas naturales de areola rosadita le han servido de ariete para derribar las puertas de la industria yanqui. Ahora va y viene con la confianza del que se sabe amado en todas partes.
Lily Ivy
Permitidnos que colemos a esta advenediza y probable one hit wonder. Llega del mundo de las webcams (otro que tendrá su propio top más pronto que tarde), solo ha rodado una escena y ha sido con su novio, pero la impresionante belleza juvenil de su rostro y las formas esculturales de su armonioso cuerpazo nos aturden los sentidos. Especialmente esos pechos perfectos con una proporción ideal para su tipo de constitución física.
Lucy Li
Esta checa de facciones suaves es lo que los anglosajones llamarían «un pony de un solo truco». No ha sido capaz de demostrar más talento que el de su impactante presencia física, pero no se le puede negar una majestuosidad natural. Lucy Li se mueve como si flotase y de hecho sus tetazas blancas y rebosantes también parecen flotar contra todas las leyes de la física.
Cassidy Banks
Los hermosos pechos naturales de Cassidy Banks nos sirven para cubrir tres cupos en uno solo: el de la diversidad étnica, el de las muy infravalorados pero siempre valiosas tetas con cierto nivel de caída moderada y el de algo que muchos ni siquiera se han parado a considerar como son las areolas incoloras a menudo rodeadas de sutiles venillas azules. Supongo que a algunos nos les gustarán esas cosas. Lo sentimos por ellos.
Sensual Jane
Nos faltaba una rumana en esta lista, otra cantera que ha bajado su volumen de producción pero que va sacando alguna perlas impresionantes de vez en cuando. Y que conste que no ha sido queriendo: la de Sensual Jane son posiblemente las tetas XXL más populares del porno europeo, y encima da la casualidad de que son del todo naturales. También es la única de la lista que podríamos colar en la categoría de MILF, así que su inclusión es del todo justificada.
Katarina Dubrova
Casi parece un top de checas, pero es inevitable: la supremacía física de esas mujeres roza lo insultante. Un claro ejemplo es Katerina Hartlova, una autentica belleza sencillamente perfecta que corona esa sonrisa confiada con unas tetazas que parecen de otra época. Además este es uno de esos casos en los que la starlet dicidó desnudarse también durante su embarazo y aquella delantera acentuada por el período de gestación se salía de todas las escalas de medición.
Mandy Dee
Terminamos esta lista con otro fenómeno de la naturaleza, otro caso de esbeltez y tetazas naturales impropias de ese tipo de cuerpo pero extraordinariamente favorecedoras. Mandy Dee es además un caso de plenitud pornográfica: cabalga como una bestia, chupa como un tragasables y explota a las mil maravillas el virtuosismo anatómico del que disfruta. Lo único malo es que cada vez aparece menos, pero cuando lo hace es para deslumbrar.
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