Siempre pretendimos verla como la mujer que venía a ocupar el trono cubano de Abella Anderson, pero está claro que la aspiraciones de Luna Star son distintas y a más largo plazo en lugar de la eclosión rápida con final abrupto de la batidora caribeña. Son dos formas legítimas de entender el porno, y últimamente Luna parece estar cogiendo aire o quizá pensando en un adiós temporal. Tres escenas en los últimos cuatro meses avalan esta tesis, así que por lo que pudiera acontecer hoy vamos a disfrutar de su más reciente trabajo, esta vez para Naughty America y en compañía del novato Robby Echo.

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