La bella Lizz Tayler nació en Arizona hace menos de 22 años y entró en el pornomundo a mediados de 2010, respondiendo a ese canon de belleza que está empezando a hacerse un hueco importante, con mujeres de cuerpo esbelto pero bien proporcionado, a menudo pálidas, de rasgos relativamente delicados y melena oscura. A pesar de que todavía no la habíamos visto montar en Orgasmatrix, esta muchachita consiguió en su primer año una nominación al premio AVN a la mejor actriz revelación, así que merece la pena seguir sus progresos en la industria, máxime si se trata de románticos mete-y-saca como el que sigue, por obra y gracia de Bruce «bicolor» Venture.
Por cierto, un curioso dato: si os fijáis bien, durante los 20 minutos de escena siempre hay algo que cubre su vientre, ya sea una toalla, las manos de Bruces o sus propias piernas. El motivo es que entre las cuatro estrellas que sí se ven (más o menos) Lizz lleva tatuado el nombre de su pornstar favorita: Briana Banks. Parece ser que el tatuaje se lo hizo antes de decidirse a probar suerte en el porno, cuando Briana era su ídolo y su ejemplo a seguir. Según ha comentado en un foro, está muy orgullosa de lucirlo y más ahora que conoce a la diosa rubia y se han hecho buenas amigas, pero en breve se lo hará quitar por cuestiones comerciales como en este caso. Parece que a PornPros no le gustan los homenajes.
Comentarios