Jennie Rose, una primeriza actriz porno coreana-estadounidense, cuyo físico y atractivo oriental está llamando la atención de forma considerable en el gremio, presenta todos los “tics” de las chicas que desean aparentar total determinación en sus inicios en el negocio. Esto es, que no desperdicia la ocasión para decir que ama la industria del porno —aunque se crió en un hogar muy conservador —, que es una chica muy sexual, y que ya se masturbaba hasta en el vientre de su madre (entiéndase la ironía). Además, es especialmente diestra en tres cosas: follar, cocinar y pintar, y exactamente en ese orden, dice de forma jocosa. Por lo pronto, esta muy orgullosa con sus trabajos de alcoba realizados para Vixen Media Group, e irán saliendo más escenas filmadas en otros estudios norteamericanos. Veremos su evolución con hechos, puesto que la palabrería se disuelve como un azucarillo muy a menudo, especialmente en el mundillo del porno.
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