Una de las producciones más rompedoras e interesantes del año pasado la dirigió Dana Vespoli, se titulaba Girl / Boy #2 y volvía a ser una de esas películas que tratan de desafiar un poco la rol de género dentro del porno y de la sociedad en general, una diversificación en la manera de representar a las personas que siempre es beneficiosa para cualquier forma de entretenimiento. De aquella cinta se hizo muy famosa una escena que ya recogimos, el fascinante polvo entre Valentina Nappi y Buck Angel, el hombre con coño, pero nos faltaba dar cabida a otro interesante cruce.
El de Jiz Lee y Ruckus es técnicamente un polvo convencional: un hombre y una mujer, una polla y un coño; pero en seguida veréis que la clasificación como queers en ambos casos hace del sexo un espectáculo diferente, fresco y lleno de matices que el porno suele ignorar de forma deliberada. Ella con aires masculinos, él con un vestido de mujer.
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