Si mal no recuerdo la última vez que tuvimos noticias de Jenna Haze fue en un reportaje muy al estilo de las revistas del corazón con nuestra heroína en bikini, completamente natural y más parecida a tu vecina del cuarto que a la mayoría de hembras siliconadas que pueblan el universo del porno. En aquella ocasión, y con cierta razón, no fueron pocos los que se preguntaron donde estaba la gracia de ver a una actriz porno vestida y sin maquillaje. Hoy a raiz de la entrada de los juguetes eróticos he creído conveniente recuperarla con una de sus especialidades: en compañía de un gran dildo y dispuesta a penetrarse el ano.
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