Debe ser duro y perturbador que una prometida se instale en una suite en vísperas de su boda, y que el empleado del hotel sea Anton Harden, que no solo gasta un vergajo de mil demonios, sino que, además, la chica (Jazmin Luv) decide probarlo pese a que se trate de un miembro más grande que su antebrazo. A ver cómo ese futuro esposo da la talla en la noche de bodas y en días sucesivos… Recurrimos de nuevo a la visión pornográfica moderna de Kayden Kross con uno de sus típicos y cuidados metrajes con trama, pero que en esta ocasión puede acomplejar al común de los mortales.

Comentarios