La mezcolanza genética de esta peruana y colombiana que además se crió en Florida le proporciona algo más allá del físico: una capacidad de seducir con el movimiento, la mirada y el tono de voz del que la inmensa mayoría de pornstars anglosajonas carecen completamente y que en Europa también escasea de forma evidente. Isabella de Santos ha recorrido el camino inverso: ha demostrado una actitud colosal desde que debutó y ha sido su físico, bonito pero discreto, la faceta en la que ha tenido que progresar. Y ha valido la pena: aquí la tenemos en Wet Asses #5 de Jules Jordan demostrando que su culo no será grande pero sí juguetón.
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