Ayer nos dijeron que a ver si publicamos más material de Little Caprice y, joder, es cierto: llevamos desde 2016 sin acordarnos de ella, como si no fuese una mujer inolvidable. Gran parte de la culpa la tiene que la deliciosa checa lleve ya unos años trabajando exclusivamente para sí misma, rodando material que vende en su web y no formando parte del ecosistema del porno europeo comercial más allá de acudir a ferias y eventos del sector.
En esta senda individualista nos hemos perdido, por ejemplo, algo tan importante como la primera vez que Caprice folló ante la cámara con un actor negro. Está claro que ni siquiera los emprendedores del porno ignoran las tendencias que dominan el mercado, así que el pasado mes de mayo la eterna diosa teen se estrenó finalmente con un rabo afro. Eso sí, a la cita como siempre no faltó su novio.
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