Está claro que a Hard X le ha comido mucho terreno Gren Lansky en cuanto al gonzo elegante, así que últimamente parecen apostar por algo un poco más extremo y vulgar que refresque en cierto modo el estilo de la productora de Mason. En esa dirección editorial se enmarca este escenón absolutamente memorable que acaba de salir: Holly Hendrix, que parecía haberlo hecho ya todo en el porno, lleva a cabo por primera vez una escena anal interracial. Hasta aquí sería bastante normal si no fuese porque la menuda starlet de 1,47 y 41 kilos de peso se decidió para este pequeño debut por el rabo inconmensurable de Mandingo, una herramienta de vértigo.
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