Siempre que se toca el tema de los implantes, los elementos insignia que salen a relucir son Jayden Jaymes, Kyra Hot y recientemente Lexi Luna, pues ellas conforman las mayores exponentes de que la humanidad ha logrado avanzar lo suficiente para imitar casi a la perfección una de las obras más bellas de la naturaleza, como lo son los jugosos pechos de una tetona. Y si bien estos no se llegarán a sentir tan suavecitos como los de mujeres perfectamente dotadas como Valentina Nappi o Gabbie Carter, les aseguro que el morbo que aportan cuando una mujer decide sacar la vaquerita que lleva dentro, y esas tetas plásticas empiezan a rebotar, hará que se olviden por completo si se trata o no de elementos provenientes del quirófano o de la naturaleza. Hoy hago la propuesta para expandir esa lista, donde solo entran las tetas artificiales del más alto calibre, e incluir a Kenzie Taylor.
Una rubia que además que realiza un excelente despliegue de cómo se debe de mover una mujer para aprovechar el hipnótico ritmo de sus implantes, también disfruta al ser sodomizada. Lo que la convierte, si dejamos a un lado los elitismos de las tetas naturales, en el juguete perfecto. Además desde los ángulos adecuados pareciera que no ha recibido ayuda del bisturí. Así que si les gustan las tetonas y los anales, hoy se come. Y si en sus radares tienen alguna otra tetona que no haya aparecido aún en este sitio, o por descuido la tenemos abandona, no olviden de mencionarla.
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