La próxima vez que Eva Angelina anuncie su retirada podría sucederle como en el cuento de Pedro y el lobo (con algo más de embarazos, crisis profesionales y ninfomanía confesa y menos lobos): nadie le va a creer. Nos la ha colado ya varias veces, pero la adorable pornstar ahora reconvertida en bestia mefistofélica del sexo sabe cómo hacerse querer y obligarnos a perdonarla. Hace una semana, sin ir más lejos, volvió a practiar el anal casi un año después de la última vez, rubricando una escena llena de intensidad y desenfreno.

Comentarios