Alyssia Vera, una excowgirl de Kansas, tuvo una vida digna de una novela, pero con más giros de cama que de trama. A sus 35 años, ha dejado atrás un pasado de relaciones tóxicas y maridos infieles, encontrando su verdadera pasión, el cine para adultos. Primero fue por amor (se lo propuso su primer y pendenciero marido), luego por curiosidad y, claro, también por la pasta. Se trasladó de un Kansas conservador a Dallas, donde la libertad y el fitness son ahora sus nuevos amores. También intentó hacer sus pinitos como cantante, pero el sugar daddy con el que estaba la desmotivó, aunque estuvo cerca de cantar el himno en un partido de los Chiefs. Ahora, entre cámaras y pesas, se muestra al mundo como una MILF empoderada que ha superado los avatares con un toque de humor irreverente y lujuria a raudales.
DP y DPP
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