Durante años y años, los fans han esperado el lanzamiento de Duke Nukem Forever, para luego acabar en decepción total. Por suerte, no hemos tenido que esperar tanto para poder disfrutar de una versión porno (en peli) de este FPS, con ese legendario y macarra personaje, al que imaginamos disfrutando de nuestra web por ejemplo. El personaje está encarnado por… ¡Ron Jeremy! Sorprendentemente, este Duke también pega bastante tiros… y también bastantes eyaculaciones en los rostros de las actrices porno que se folla, entre las que destaca nuestra amica Abella Anderson.
El concepto de este Duke Fuckem es sorprendente, pero en el fondo, muy fiel con la idea original del juego: casi todas las escenas son en POV. Suena lógico, ¿no? Entre esto y las partes en la que imita directamente el transcurrir del juego, el 80% de la peli es una experiencia en primera persona, rota de vez en cuando para introducir un poquito el argumento de la peli.
La peli comienza a saco. Estamos en el futuro, y un malvado invasor payaso manda a sus esbirros a por mujeres terrestres. Los aliens desembarcam en Miami. Duke Fuckem está viendo el canal porno. La primera escena es, por tanto, lo que está viendo Fuckem en la tele, y se trata de Codi Carmichael, guapa y con buenas tetas, haciendo una mamada y follando con un tipo anónimo. Esto ya consume la primera media hora de la peli.
El informativo nos cuenta que los aliens invaden la tierra. Y una cosa es invadir “y otra dejarme sin mi porno”. ¡Está claro! Ron se arma… y a partir de ahora le peli transcurre igual que el jueguecico, con los marcadores de vida y munición en los lados de la pantalla. Pero antes de que comience la acción, llega el momento de algo de sexo. Y Nukem se estrena con la tetona Bella Reese. ¡Cuán pícaro es nuestro amigo!
Una vez follada… nos la volvemos a follar, ahora en la cama. Y atención, cuando folla, Duke siempre dice las mismas frases, repitiendo. De hecho diría que son los mismos simples “holy shit”, “fuck yeah bitch”… continuamente. Los que hayáis jugado al tipo de juego donde un número de frases se repite constantemente seguro que os hará mucha gracia.
¡Pero los invasores atacan! Varias naves sobrevuelan Miami, destrozando los edificios colindantes, con unos efectos especiales bastante lamentables, la verdad. Una chica alienígena secuestra a la nena de Duke. El tipo parece confundido, y cae bajo el fuego enemigo . Por suerte, un sargento amigo suyo le reanima y le pone un poco las pilas: es el momento de repartir tortas! Duke se bebe una pócima y rejuvenece (cambiando de actor), y se equipa con una arma (una pistola de plástico) y se dipone a matar enemigos, utilizando escopetas y rifles de francotirador, en escenas que recrean (con cierta torpeza) momentos del juego.
Y entre tiroteo y tiroteo tiene que haber sitio para más sexo, ¿verdad? Verdad. En dos escenas casi consecutivas, vemos como se folla a la mencionada Abella Anderson, cuya escena podéis ver arriba. Después es el turno de follarnos a una rubia, en este caso, Steve Shae, para poner la nota de color.
La peli se cierra con la única escena que no está rodada con el POV, en la que viene s a ser una especie de premio para Ron. Jamey Janes, una punk con tatuajes y el pelo corto, quiere agradecer que haya salvado la tierra con una larga mamada en etapas, que él también devuelve. Es, a la postre, la mejor escena: Jamey le tiene muchas ganas a la polla de Ron Jeremy. Es curioso que este, pese a estar mayor y gordo, tiene la mayor complicidad con su pareja y el mayor morbo. Quien tuvo, retuvo, y esta felación es la mejor escena.
Odio decir la frase “la odiarás o la amarás”, pero este es un caso similar. La peli no es, ni mucho menos brillante, pero si te hace gracia el concepto de juntar un FPS con POV (juegos en primera persona con porno en primera persona), es muy posible que pases un buen rato. Los guiños y parodias de algunos aspectos del videojuego te pueden hacer sonreír varias veces: no es como el Doom Chiquito de cachondo pero funciona.
El sexo… pues no está mal. Es correctito, con chicas contundentes y esa última escena que está bien. ¿Qué le falla? Pues lo que hemos denunciado algunas veces: variedad de situaciones (solo hay parejas), y un poco más de guarrería: algún anal o algo así por aquí o allá.
La dirección es ciertamente torpe, y da la sensación de producto acabado con prisas y de cualquier manera, pero que al final otorga cierta frescura al producto. Al final, y pese a sus defectos, resulta por ser una peli simpática, con la que tampoco creemos que nadie vaya a hacerse el pajote de su vida, pero que entretiene una tarde y puede gustar a los fans del juego y/o las actrices aquí presentes.
La conclusión, claro está, es que necesitamos más porno parodiando videojuegos. Tenemos por ahí algo de Super Mario, algo de Tomb Raider, GTA… pero que son más bien parodias de películas que de los propios juegos. pero queda mucho camino aún y mucho por recorrer. Aún no hemos visto un porno de Fallout, Skyrim o Dragon’s Age.
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