Volvemos a la estética que más nos gusta cazar para esta sección, ese canon de belleza que en muchos hace brotar esa media verdad que dice «ya no las hacen así»; posiblemente las hacen mucho más guapas, pero hay algo en las tetas de los setenta que se quedó en aquella década y nunca más volvimos a ver. Un magnífico ejemplo, el de hoy: Linda Schmitz (que también figuró como Linda Schmidt, Megan Schmidt y Laura Lynwood) apareció por primera vez en una publicación masculina en 1971, y no le faltó trabajo durante los siguientes siete años que duró su carrera como modelo erótica, saliendo en revistas como Fling, All Man, Gondel, Jaguar, Man’s Pleasure o Gent and Caper.
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