Janice Griffith se dio a conocer en la industria del porno de la mano de James Deen en una de sus primeros trabajos directoriales, y desde luego su físico no es para todos los gustos en un mundillo obsesionado con los culos planetarios y las tetas titánicas. Ni siquiera su belleza le libra de las críticas por su constitución delgada, pero eso no va a detenerla: Janice sabe que hay quienes apreciamos su trabajo y por eso sigue progresando a cada escena. Y si la llama el gran Danny Dong, por algo será.

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