En el mismo escenario y con el mismo compañero de reparto que el día en que nos cedió por fin su primera intrusión trasera, Bella Reese acude esta vez al patio de Bruce Venture con otra intención: echar un polvazo más salvaje y dejarse rellenar como un pastelito de crema. Bruce pone la carne y Bella, liberada de esa presión que se supone en un estreno anal, se deja llevar por el tsunami de cerdería que ella misma genera. Sus cabalgadas demenciales deberían salir en los manuales sobre cómo hacer porno.
Bella Reese en busca de un buen relleno
Este post ha sido publicado por Pinjed. Ahora tú también puedes compartir con la comunidad de Orgasmatrix tus propias noticias, reseñas, o cualquier hallazgo pornográfico que consideres interesante.
Comentarios