Tres mujeres de escaso nombre en el circuito americano y, para qué engañarnos, no muy agraciadas en belleza como la mexicana Sophia Castello (de quien Fogardo decía que le recordaba a Sativa Rose y lo cierto es que dio en el clavo, respetando las distancias) y las californianas Destiny y Pursuajon dan un memorable recital de traseros hiperdesarrollados de perímetro sobrenatural, contoneándose en bikini, jugueteando y finalmente pasándose por la piedra a dos auténticos culófilos como Jordan Ash y Preston Parker.

Comentarios