Se nos había pasado por alto la que sin ninguna duda es la escena más relevante de Dredd #4, el monográfico de Jules Jordan dedicado al mamotreto fálico sureño. Y digo que es la más importante, no solo porque la protagoniza la diosa aussie Angela White (quien, por cierto, ha hecho doblete de premios con el AVN y el XRCO a la starlet del año), sino porque es el primer encuentro de la voluptuosa actriz porno con el caballo humano de las trenzas nacido en Florida. Y si eso os parecen pocos argumentos, os falta lo mejor: Angela se atrevió a practicar en anal con él, algo que no todas las profesionales de este negocio están equipadas para ejecutar.

Comentarios