Hoy os traemos un caso de one hit wonder particularmente especial: Andie Valentino (también conocida como Andy Valentino, Andi Valentino, Andrea, Andreza Valentino o Andie Carelli) estuvo desde 2006 hasta finales de 2011 trabajando en el mundo del porno y el erotismo, pero siempre limitándose a sesiones de fotos en solitario, vídeos en los que se masturbaba y escenas lésbicas de baja intensidad con alguna excepción en la que se sumergió en el nicho del squirting. Era quizá una de las modelos eróticas más populares de su generación y, por una vez, tuvo el tan esperado desliz de acabar probando el poro heterosexual: un polvo sin demasiado brío con Barrett Blade para la cinta Perfect Match que Wicked publicaría en 2007. La cosa no debió de gustarle ni un poquito, porque en los 4 años más que duró su carrera jamás volvió a acercarse a una polla frente a la cámara.
Bola extra: en su salsa
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