Siempre hablamos de Mike Adriano como si fuese un médico especialista en el último tramo del aparato digestivo femenino, pero en realidad su labor se parece más a la de un ingeniero: el tío no cura, solo examina con gran concentración la morfología y el funcionamiento exacto de cada arruga, cada músculo y cada terminación nerviosa de los ojetes frente a él. El último objeto destacable de esta devoción suya es el culito rosado y pequeño de Alice March, una tímida veinteañera que se dio a conocer con el anal elegante y vaporoso de Tushy para terminar ahora en el otro lado del espectro, siendo analizada en Anal Casting Calls #4 de Evil Angel.
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