Continuamos esta sección centrada en la parte más importante del cuerpo femenino, con una mujer que ha pasado por diversas versiones de sí misma. Conocimos a Gia Paige como una delgada teen con unas nalgas hermosas y definidas, un rostro fino y labios carnosos. Pese a su apariencia de niña buena resulta ser una zorra hambrienta de sexo en todas sus variantes, ofreciéndonos escenas anales en reiteradas ocasiones y, demostrando, que ese culo no es de adorno. En cierto momento optó por el aumento de peso, leve por ese entonces, y resultó ser una clara mejoría ya que su anatomía recibió de buena manera los kilos de más. De esta manera el volumen extra se distribuyó de forma equilibrada por su cuerpo, volviendo sus pechos, caderas y culo más grandes y pronunciados, resaltando aún más su curvilínea figura. No obstante, su aumento de peso no se detuvo y llegó a rozar la categoría BBW, con algunas escenas en las que se la puede ver con un abdomen flácido, pecho notablemente más grande y una micro papada. Que no se me malinterprete, siguen siendo escenas dignas de ver. Quien siga su Instagram se percatará que ha bajando una talla o dos, quizás una recomendación para no perder de vista a las productoras. Pese cuanto pese Gia es hermosa y sexy por donde se la mire.
Adonitología: Todas las fases de Gia Paige
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