Hace un par de años os hablábamos de Adeline Lafouine, una secretaria del Parlamento suizo que se hizo muy famosa internacionalmente cuando alguien descubrió su afición por hacerse selfies eróticos en su puesto de trabajo. En los propios comentarios de aquella galería furtiva alguien comentó sobre la doble vida de Adeline, y se nos quedó pendiente repasar esa faceta suya hasta hoy, que nos hemos cruzado con material suyo.
Adeline White era el alter ego pornográfico de Adeline Lafouine, y aunque desapareció del mapa tras descubrirse el pastel, lo cierto es que el trabajo que había hecho para productoras francesas demostraba una capacidad para el sexo extremo de lo más desarrollada.
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