La ucraniana Adel Asanty inició su carrera pornográfica en junio del 2018, aunque en realidad ella tenía la intención de unirse a la industria un año antes, puesto que sentía verdadera fascinación por el oficio desde muy joven, especialmente por Bonnie Rotten y Adriana Chechik. Sin embargo, no pudo cumplir con su propósito porque tuvo problemas con su pasaporte, lo que le impidió asistir a un casting organizado por Pierre Woodman. Adel lo volvió a intentar al año siguiente y logró su objetivo con creces. Desde entonces ha estado filmando escenas hardcore en su mayoría, subgénero en el que destaca gracias a una apariencia llamativa y transgresora, además de su total predisposición a la hora de rodar escenas de sexo anal extremo. En esta reciente entrega de Evil Angel podemos comprobar el potencial de esta ucraniana de 23 años amante de los tatuajes y de las perforaciones de todo tipo, incluyendo los sondeos dobles en su elástica retaguardia.
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